Historias de Hospital

Salgo al pasillo y veo a una chica delgada de unos 18 años enfundada en un camisón azul que avanza hacia su habitación apoyándose con una mano en la pared y con la otra cogiéndose a su madre. Suena un móvil y la madre mira un instante a su hija y sin decir nada sale disparada, desmintiendo eso de que la gente mayor no puede correr y dejando a su hija avanzando al mismo paso de caracol pero con el único apoyo de la pared para seguir avanzando. Pienso en pararme y ayudarla, pero no me decido hasta que ya no necesita ayuda: ha llegado a su destino.

Son esas ocasiones en las que pienso si los teléfonos son tan importantes. Como si ese desconocido que llama fuera más importante que el conocido que espera.

 

 

  

6 comentarios

[Oyros - 27 de octubre de 2006 - 05:09]

En general, somos incívicos por naturaleza. Siempre queremos ser los primeros en todo, sin importarnos por encima de qué o quien tengamos que pasar; sin importarnos si nuestras acciones molestan a nuestros vecinos.

El móvil sólo es un ejemplo más y parece que casi nadie recuerda que tiene un modo 'silencioso' para evitar esas cosas.

El civismo es una utopía...

[Antonio - 18 de octubre de 2006 - 21:46]

Es verdad, si el teléfono fuera una persona le diría que es un maleducado.
Cuantas veces el teléfono ha interrumpido una conversación, - disculpa, me llaman por teléfono -, o cuando estás haciendo algo importante en tu trabajo: por ejemplo atendiendo a un cliente potencial que se ha dignado a recibirte y tratas de venderle un producto de tu empresa y en el momento menos oportuno, “rin”, “rin” suena el teléfono – perdone la interrupción – . Resulta que es un tío Manolo que se ha equivocado al marcar y encima lo tienes que perdonar; pero la interrupción ya está hecha.
Porque tanta prisa en contestar a las llamadas inoportunas. Habría que inventar un aparato con un software especial de Antillamadas-inoportunas que nos adivinara las intenciones del pesado de turno que te está llamado en el espacio-tiempo indebido.
También sería bueno que, igual que para conducir un vehículo tienes que pasar un examen para obtener el permiso de circulación, para poder utilizar el teléfono habría que aprobar un examen de educación vial-telefónica.
Antoni944

[Oyros - 19 de agosto de 2006 - 05:04]

La gente que no está... es cierto. Lo peor es que suelen maltratar a quien tienen cerca y no se dan cuenta que con eso, a veces, se acercan a quedarse solos. No se dan cuenta del dolor que producen sus palabras ni de lo injusto de las mismas. No se quieren dar cuenta que esas personas que les ayudan tienen una vida paralela a la que comparten con ellas y que quieren vivirla. No se dan cuenta de lo que sacrifican y dejan de hacer para poder estar con ellas.

Sí. Hoy es uno de esos días que me siento quemado.

[Legeero - 17 de agosto de 2006 - 10:45]

Necesidades creadas, todo aquello q sin ser necesario adoptamos como tal y sin lo cual nos sentimos desgraciados.

Por desgracia, las personas mayores suelen valorar más la gente q no está o q simplemente tienen "cosas más importantes q hacer" q aquéllas q siempre estamos encima.

PD: Hay q hacer "ganas de verse" ;)
un saludo

[Oyros - 15 de agosto de 2006 - 13:12]

Necesidades creadas... son esas prioridades que nos ponemos a la hora de vivir. Cosas sin las que hasta hace no mucho la moyoría de nosotros no teníamos y sin las que ahora muchos no son capaces de pensar.

Hay avances de la tecnología que son útiles en su justa medida, pero son precisamente las prioridades lo que nos permite elegir cuando algo es o no es importante.

En tu caso, con el móvil, hay mucha gente que quiere hablar contigo a veces pero como tu móvil suele estar indispuesto.. mientras para tí el móvil es una atadura a la realidad.

Hay veces que, cuando cortas cuerdas, enfadas a quienes las quieren coger...

[icaro-postmortem - 09 de agosto de 2006 - 22:21]

Son necesidades creadas, en mi opinion la psicología es tan potente q tenemos incurstado en la sesera el hecho de q es urgente atender al movil,o TENERLO!, la realidad es q el progreso nos trae un monton de ventajas, pero cuando los productos del progreso se tranforman en productos del consumismo, nuestras mentes se encharcan, y parecemos tontos babeantes incapaces de percatarnos de lo q es realmente importante aunke este delante de nuestras narices.
(...por supuesto, todo el mundo sabe q lo realmente importante siempre sera la cerveza..juasjuasjuasjuasjuas)